Foto de Tobias Bjørkli: https://www.pexels.com
El miedo me acecha debajo de la almohada
se disfraza de imposibles
de catástrofes
de exilio
también de miedo.
Huyo de mis llamados
me aquieto
evito soñar
tapo mis oídos
es el miedo que canta
en la mitad del mar
con voz de sirena.
Me dijeron que verle a los ojos
me convertiría en estatua
“Nunca mires al monstruo de frente
sus fauces te devorarán”
dijeron
Pero un día miré…
Lentamente giré mi rostro hacia el lugar prohibido
mi corazón a punto de estallar
con mis pupilas abiertas de espanto
miré
allí sólo había un par de ojos
mis ojos
y una sonrisa pícara y descubierta
no más
Hola, le dije
Hola, me dijo
Ese día
al fin
pude zarpar.